FOTOMODULACIÓN
La técnica de FOTOMODULACIÓN como tratamiento no quirúrgico del envejecimiento facial marca el
comienzo de una nueva era en tratamientos no invasivos.
La fotomodulación persigue estimular algunas funciones celulares. Por eso se utiliza en combinación
con otras técnicas, creando un ambiente de temperatura ideal para dinamizar la formación de colágeno,
elastina y ácido hialurónico.
El estímulo de las estructuras cutáneas conduce a:
Aumentar la síntesis de colágeno
Aumentar las proteínas de la matriz extracelular
Disminuir las proteínas degradadoras (colagenasas) de la matriz extracelular
La Fotomodulación se realiza con equipos emisores de luz coherente de banda estrecha
El resultado es un aumento de fibras de colágeno y de proteínas de la matriz extracelular
La epidermis recupera elasticidad y disminuye el tamaño de los poros obteniéndose una mejoría en
las pieles fotoenvejecidas.
Se puede aplicar en el conjunto del rostro, escote o manos.